martes, 26 de mayo de 2015

John Nash, la búsqueda permanente de la idea original.

Vaya, a través de este comentario, nuestro pequeño homenaje a un gran matemático estadounidense nacido a comienzos del pasado siglo. Hablamos de John Forbes Nash, que hace unos días perdió la vida a consecuencia de un desafortunado accidente de tráfico. 
En el campo de las matemáticas, Nash destacó por su estudio y especialización en la teoría de juegos, la geometría diferencial y las ecuaciones en derivadas parciales. Uno de sus mayores logros profesionales le llegó en el año 1994 cuando le concedieron el Premio Nobel de Economía. 
Ya desde niño, John Nash se mostraba diferente, introvertido, con acentuados trastornos emocionales y una capacidad intelectual atípica para su edad. Se sostiene que fue la lectura del libro "Men of mathematics", publicado por Eric Temple Bell en 1937, la que motivó su enorme interés por las matemáticas y la química.
Con tan solo 20 años consiguió una beca para desarrollar el doctorado de matemáticas en la Universidad de Princeton. La carta de recomendación contenía una única línea: « Este hombre es un genio ».
Muy reconocido siempre entre el gremio de investigadores y de expertos relacionados con sus aportaciones a las matemáticas aplicadas, Nash obtuvo una plaza de profesor en el MIT $($Massachusetts Institute of Technology$)$, donde más tarde encontraría en una de sus alumnas a su futura esposa, la salvadoreña Alicia Lardé. Tras un año de matrimonio John fue diagnosticado de esquizofrenia paranoica, enfermedad que se dedicó a combatir durante el resto de su vida. 
Sus teorías han influido, entre otras cosas, en las negociaciones comerciales globales, en los avances de la biología evolutiva y en las relaciones laborales nacionales.
Quizás sepáis mejor sobre quien escribimos si habéis visto la película "Una mente maravillosa", protagonizada por Russell Crowe en 2001. Se trata de un drama biográfico inspirado en la novela homónima de Sylvia Nasar y que cuenta la vida de John Nash. La historia comienza en los primeros años de vida de este prodigio de las matemáticas, quien más adelante comienza a sufrir los delirios de una enfermedad psiquiátrica, mientras ve tristemente como afecta a su condición física y a sus relaciones familiares y amistosas. El filme fue galardonado con cuatro premios de la Academia. 


"He buscado a través de lo físico, lo metafísico, lo delirante, … y vuelta a empezar. Y he hecho el descubrimiento más importante de mi carrera, el más importante de mi vida. Sólo en las misteriosas ecuaciones del amor puede encontrarse alguna lógica".


Pablo Pozo
Ingeniero en Telecomunicaciones